martes, 22 de marzo de 2016

La ensalada rústica de soja, patatas baby y corazones de alcachofa


Una canción para que salga rústica y sabrosa: My Silver Lining - First Aid Kit (2014).

He aquí un plato al mismo tiempo pobre y refinado: una deliciosa enalada de soja verde, patatitas gourmet y corazones de alcachofa. Perfecta para disfrutarla tanto en casa, como en el trabajo.



Ingredientes para 2 personas:
110g de soja verde
10-12 patatitas gourmet
6 corazones de alcachofa a la plancha (de buena calidad)
1 puñado de pipas de calabaza al natural
aceite OVE, sal y pimienta negra
escamas de Parmesano (opcional)

Dejamos la soja en remojo durante al menos 12 horas. Una vez que la soja esté lista, la hervimos durante unos 20 minutos (probadla antes de quitarla del fuego), la colamos y aliñamos con sal, pimienta y aceite al gusto. Precalentamos el horno a 180º. Lavamos las patatas, las secamos, las ponemos en un contenedor para el horno aliñando con sal, pimienta negra, aceite, romero y salvia. Mezclamos bien y horneamos nuestras patatas hasta que estén doradas y bien cocinadas (una media horita). Para componer el plato, ponemos una base de soja verda, añadimos las patatitas, los corazones de alcachofa partidos por la mitad y las pipas. Acabamos con unas gotas de aceite, pimienta negra molida y, si queremos, unas escamas de queso Parmesano. -Anna-



sábado, 12 de marzo de 2016

Ragù de seitán y tomates secos


Una canción para que se parezca al ragú de vuestra mamá: Vento d'Estate - Max Gazzè (2009).

Tradicional, versátil y delicioso, el ragú es uno de los pilares de la cocina italiana. Quieras o no quieras, siempre acabarás teniendo un plato con ragú que te guste. Entonces, si lo que os apetece es volver a recordar esos aromas sin tener que comer carne. este ragú vegano es vuestra solución. Dejad que sus sabores os seduzcan.


Ingredientes para aprox. 3 platos de pasta (o una lasaña pequeña):
1 zanahoria mediana
1 tallo de apio
½ cebolla
1 pequeño diente de ajo
250g de seitán
1 pequeño vaso de vino blanco
una cucharada de pasta de tomate
60g de tomates secos
500g de tomate triturado
una cucharadita de nuez moscada
aceite OVE, sal y pimienta negra

En un mixer, trituramos la zanahoria, el apio, la cebolla y el ajo. Los vertemos en una holla con 3 cucharadas de aceite OVE y cocemos a fuego medio durante unos 5 minutos. Mientras tanto, en el mismo mixer trituramos el seitán, lo añadimos a las verduritas, mezclamos y esfumamos con el vino blanco, que dejamos evaporar. Ahora es el momento de añadir la pasta de tomate, triturar los tomates secos y añadirlos en la holla junto con el tomate triturado. Sazonamos con sal, nuez moscada y pimienta negra, mezclamos bien y dejamos cocer a fuego lento durante 25 minutos. Buon appetito! -Anna-


jueves, 3 de marzo de 2016

Vegan panna cotta de chocolate al perfume de coco y avellanas


Una canción para que salga intensa y cremosa: I will wait - Mumford & Sons (2012).

Echando un vistazo a nuestro blog os habréis dado cuenta de que no somos fans de los flanes. ¿Por qué? Pues, la verdad es que ni nosotros los sabemos ya que esta maravillosa panna cotta ha resultado ser un postre extremadamente sencillo, delicioso y natural. Una intensa crema de chocolate negro y nata de coco, delicadamente perfumada con leche de avellanas y vainilla, servida con una densa crema de frambuesas frescas, que rompe con su acidez la dulzura del chocolate.

Ingredientes:

Para 2/3 panna cotta:
250ml de nata de coco
150ml de leche de avellanas
100g de chocolate negro vegano (min.70% de cacao)
5g de cacao puro en polvo
1 vaina de vainilla
1 cucharada de agar-agar en copos
sirope de ágave al gusto

Para completar el plato:
125g de frambuesas
crocante de avellanas
coco rallado
chocolate en trozos
todo lo que os guste


En una holla antiadherente ponemos todos los ingredientes menos el agar agar y los vamos calentando a fuego lento, mezclando continuamente para que el chocolate se derrita. Cuándo nuestra deliciosa mezcla empiece ligeramente a hervir, añadimos los copos de agar-agar y seguimos mezclando unos 5 minutos más. Apagamos el fuego, filtramos la crema con un colador a malla fina para eliminar todos los eventuales restos de copos y la repartimos en 2 moldes para flan humedecidos con 1ml de agua. Dejamos entibiar una media horita y después los ponemos a enfriar en la nevera durante al menos 2 horas. A la hora de servir nuestras panna cotta, ponemos en una pequeña sartén las frambuesas con dos cucharadas de agua y los removemos hasta que se forme una crema líquida. Apagamos el fuego, la filtramos y dejamos al lado a entibar. Mientras tanto, trituramos dos cucharadas de avellanas, las ponemos en una sartén y las tostamos a fuego medio durante un minuto. Damos la vuelta a nuestras panna cotta y completamos con los arándanos y las avellanas tostadas -Anna-


sábado, 27 de febrero de 2016

Recomendamos

¡Hola amigos! Hoy comenzamos una nueva sección semanal del blog en la que recomendamos libros de cocina que nos encantan.
En Crónica de una Merienda Anunciada siempre tenemos algún libro abierto en la cocina. Suelen terminar con pequeñas manchas, ya sean huellas dactilares con mantequilla, gotitas de vino, o la estampa que se forma cuando utilizamos una cuchara de cocina como sujeta páginas. Pero el caso es que le damos uso a los libros de cocina y nos sirven como fuente de inspiración. Queremos compartir con vosotros algunos de nuestros favoritos.

Esta semana: BRUNCH AT BOBBY’S: 140 recetas para la mejor parte del fin de semana. 


Brunch: esa comida mágica que te deja combinar almuerzo, desayuno y mimosas, es un espacio de creatividad que se ha hecho popular en los últimos años (en Brunchelona y todo el mundo). BRUNCH AT BOBBY’s empieza con ideas para cafés, cocteles y cubre cada rincón del Brunch proponiendo recetas de huevos, gofres, pancakes y mucho más. Nos encanta que hay una sección entera dedicada a los gofres, las torrejas y los pancakes.

Escrito por Bobby Flay, Stephanie Banyas y Sally Jackson (¡oye, son un equipo de tres como Anna, Marco y Gaby!), las fotografías son espectaculares y las recetas sencillas y fáciles de seguir. Entre las recetas que más llaman la atención son sus Pancakes de bizcocho de zanahoria con un sirope maple con queso crema o los Sticky Buns. Los pancakes son muy originales y la zanahoria rallada crea una mezcla maravillosa que es espesa pero todavía produce pancakes esponjosos por dentro. Si alguna vez han probado Cinnamon Rolls o rollitos de canela, pues los Sticky Buns son un nivel superior a esos. Son rollitos horneados que tienen canela por dentro  pero no son cubiertos meramente por azúcar, sino que por encima se les decora con nueces y sirope de frambuesas y caramelo. -Gaby-




domingo, 21 de febrero de 2016

Quiche à la grecque con feta, patatas, tomates cherry y aceitunas


Una canción para amasar mejor: Waves - Young the Giant (2014).

Llegados a este punto de nuestra existencia, son pocas las certezas que tenemos. Entre ellas, que los griegos son gente abierta, muy muy muy amable, paciente y amante de la familia. Calma! Ahora no nos vengáis con que estas son tonterías! Si conocéis a algún griego que no sea así, pues, la excepción será vuestro griego, no los nuestros! Entonces, pensando en nuestros queridos griegos (y con la idea de hacer una sencilla feta al horno con tomates) hemos llegado a esta maravillosa quiche de crujiente masa quebrada, con un equilibrado relleno de patatas, tomates cherry, aceitunas negras y el irrenunciable queso Feta, que por sí solo significa Grecia.


Ingredientes:

Para la masa brisée:
70g de mantequilla fría (*o margarina)
140g de harina integral
50g de agua muy fría

Para el relleno:
1 patata mediana bio (unos 130g)
250g de tomates cherry
100g de queso Feta (*o tofu a la italiana)
25g de pulpa de aceitunas negras de Kalamata (o de Aragón)
1 chalote (opcional)
sal, pimienta negra, romero fresco


Para empezar preparamos nuestra masa brisée siguiento la receta de una gran maestra, Sonia Peronaci. Se trata sencillamente de poner en un bol la mantequilla en trocitos con la harina y de ir deshaciendo la mantequilla con la punta de los dedos hasta obtener un compuesto arenoso. Hecho esto, añadimos el agua fría y amasamos hasta obtener un resultado homogéneo. Hacemos una pelota con nuestra masa, la aplanamos en forma circular y la ponemos a descansar en la nevera.
Mientras tanto, nos ocupamos del relleno de nuestra quiche. Primero, cortamos la patata y el chalote en rodajas muy muy finas (aprox. 2 mm, mejor ayudarnos con una mandolina), las disponemos encima de unos velos de papel de cocina, salamos y dejamos descansar un momento. Segundo, cortamos los tomates cherry por la mitad, quitamos las semillas y los exprimimos para que pierdan cuánta más agua posible. Tercero, quitamos el hueso de las aceitunas y trituramos la pulpa con un cuchillo. Finalmente, desmigajamos la Feta. Juntamos todos los ingredientes en un bol, añadimos tres cucharadas de aceite OVE, romero fresco, pimienta negra al gusto y sal (sólo si hiciera falta). Sacamos la masa brisée de la nevera, la estiramos con el rodillo hasta que pueda cubrir el fondo y los bordes de un molde de 22cm, agujereamos con un tenedor, y vertemos nuestro relleno encima de la masa. Acabamos con unas gotas de aceite y horneamos 30' en horno ventilado a 170º y 10 minutos en horno ventilado con grill a la misma temperatura. Servimos tibia. -Anna-



domingo, 14 de febrero de 2016

Vegan shortbread integral con avena y almendras


Una canción para que salgan mantecosos y friables: He Doesn't Know Why - Fleet Foxes (2008).

Será por su consistencia friable y mantecosa o por su dulzura apenas perceptible gracias al contraste con su ligero toque salado, pero el hecho es que el shortbread nos enamora cada vez más. De recetas en el internet hay una infinidad, pero lo que queríamos hacer era algo un pelín diferente, más rústico y con un sabor más decidido. Fue así como decidimos crear nuestros pequeños shortbread integrales con almendras, avena y un toque inconfundible de piel de limón. ¿El resultado? Unas irresistibles delicacies veganas.


Ingredientes para 24 barritas:
250g de harina de trigo integral
50g de almendras molidas
200g de margarina de buena calidad
80g de azucar moreno
30+10g de avena integral
la piel de 1 limón bio
1 pizca de sal
2 cucharadas de almendras
1 cucharada de azúcar moreno

En un bol mezclamos la margarina bien fría cortada en daditos con la harina, las almendras molidas, el azúcar, los 30g de avena, la sal y la piel de limón y amasamos rápidamente hasta obtener una masa homogénea. Huntamos con la margarina un molde rectangular de 16x16cm, tendemos la masa con las manos hasta cubrir todo el fondo, la aplanamos y la dejamos descansar en la nevera durante una hora. Precalentamos el horno ventilado a 170º. Mientras tanto, en la batidora mezclamos dos cucharadas de almendras, 10g de avena y una cucharada de azúcar moreno. Batimos rápidamente y distribuimos sobre toda la superficie de la masa, aplastando ligeramente con el dorso de una cuchara. Horneamos dorante 20 minutos. Cortamos recién salidos del horno y dejamos enfriar antes de moverlos del molde. -Anna-



miércoles, 10 de febrero de 2016

Timbal de calabacínes con quinoa, feta y aguacate


Una canción para que salga del molde absolutamente perfecto: Blame it on me - George Ezra (2014).

¿Qué necesitamos para hacer una ensalada fantástica? Pocos, sencillos ingredientes, frescos y de buena calidad, que se combinen perfectamente entre ellos. ¿Y qué necesitamos para que esta ensalada sea aún más fantástica? Convertirla en un timbal que sea, no sólo una delicia para el paladar, sino también para la vista. Así nace la idea de esta maravilla de quinoa, queso Feta y aguacate, perfumada con piel de limón y encerrada en un delicado cofre de calabacines dorados.


Ingredientes para 2 timbales:
1 calabacín mediano bio
60g de quinoa
100g de queso Feta (*o tofu fresco)
1 aguacate
2 puñados de semillas de giraso
aceite OVE
el zumo y la piel de ½ limón bio
sal y pimienta negra


Para empezar cortamos el calabacín en lonchas muy finas por el lado más largo. Ponemos a calentar una sartén untada con un poco de aceite y vamos dorando un minuto por lado cada loncha, sazonando con una pizca de sal y pimenta y dejándolas entibiar en un plato. Ponemos la quinoa en agua hirviendo y la cocinamos durante 10-12 minutos. La colamos muy bien, la vertemos en un bol y añadimos el aguacate cortado en cubitos. Aliñamos con el sumo y la piel de medio limón, sal, pimienta negra y dos cucharadas de aceite y mezclamos bien. Añadimos la Feta desmenuzada y las semillas de girasol y volvemos a mezclar. Con el aceite, untamos el fondo y los lados de dos moldes para flan y los recubrimos por completo con las lonchas de calabacín. En cada molde ponemos nuestra ensaladita de quinoa, compactándola bien con la cuchara. Cortamos los trozos de calabacín que sobresalgan del molde (o, pudiendo, los giramos hacia el interior del molde), apoyamos un plato encima de cada timbal y le damos la vuelta, dando unos pequeños golpes sobre el fondo del molde antes de levantarlo. Completamos nuestros timbales con pimienta negra molida y unas semillas de girasol.-Anna-



domingo, 7 de febrero de 2016

Ñoquis de calabaza y mató con crema de Parmensano


Una canción para que salgan perfectos: 1979 - The Smashing Pumpkins (1995).

El almuerzo del sábado, ¿acaso hay un momento mejor para quedar con una amiga? ¿I para cocinar para ella? Obviamente no. Y ¿hay algo mejor que regalarle un plato de estos deliciosos ñoquis, dulces y suaves, sumergidos en una cremosa salsa de Parmesano y perfumados de romero y nuez moscada? Obviamente no. Entonces, ¡no esperéis más a compartir esta maravilla con los vuestros y a disfrutar de un sábado absolutamente perfecto!


Ingredientes para 2 personas:

Para los ñoquis:
500g de calabaza limpia
150g de mató (o ricotta)
70g de harina 00
20g de Parmesano rallado
1 yema
sal, pimienta negra, nuez moscada
aceite OVE
20g de mantequilla
1 ramita de romero fresco

Para la bechamel de Parmesano:
60ml de leche entera
50g de mantequilla
50g de harina 00
30g de Parmesano rallado


Para empezar preparamos la bechamel de Parmesano. Empezamos a calentar la leche, mientras que en una sartén derretimos a fuego lento la mantequilla. Una vez que la mantequilla esté derretida, le añadimos la harina, mezclamos hasta obtener una crema y, sin dejar nunca de mezclar, añadimos gradualmente la leche, hasta obtener una crema lisa y homogénea. Empezaréis a notar que, añadiendo la leche, la crema de harina y mantequilla se hace más espesa y dishomogenea: es normal, por eso hay que seguir mezclando energéticamente y añadiendo la leche sólo cuándo empiece a absorberse. Siguiendo estos pasos, obtenemos una crema lisa y homogénea; la quitamos del fuego, añadimos el Parmesano rallado, arreglamos de sal y nuez moscada y dejamos al lado cubierta por película transparente a contacto.
Para preparar los ñoquis, precalentamos el horno a 170º. Cortamos la calabaza limpia en dados, la untamos con 2 cucharadas de aceite OVE, una cucharadita de nuez moscada, una pizca de pimienta negra molida y la cocemos en la placa del horno cubierta con papel vegetal hasta que estén bien dorada y blanda (unos 40 minutos, dependiendo de la dimensión de vuestros cubitos). Una vez que la calabaza esté lista, la dejamos enfriar un rato, mientras que pasamos el mató por un colador. Hecho esto, rompemos la calabaza con un tenedor, la añadimos al mató y añadimos la yema, mezclamos bien, añadimos el parmesano y la harina, salpimentamos y volvemos a mezclar. Nos quedará una masa bastante suave. Espolvoreamos la mesa de trabajo con bastante harina, hechamos 2 cucharadas llenas de masa y, con las manos, le damos la forma de tubos de unos 2 cm de diámetro que cortaremos en trozos de unos 2 cm. Una vez formados, ponemos los ñoqis al lado en la placa del horno cubierta con papel vegetal enharinado. En una sartén, derretimos 20g de mantequilla con un par de ramitas de romero. Ponemos una holla con abundante agua salada sobre el fuego y, cuándo el agua empiece a hervir, hechamos la primera mitad de los ñoquis. Cuándo los ñoquis empiecen a subir (un par de minutos), los sacamos con una espumadera y los salteamos en la sartén con la mantequilla para que se doren. Lo mismo haremos con la segunda mitad de los ñoquis. Hecho esto, los pasamos al plato y completamos con la salsa de Parmesano, que habremos previamente calentado. Acabamos con una espolvoreada de pimienta negra, una ramita de romero y, si queremos, un par de nueces troceadas. -Anna-


domingo, 31 de enero de 2016

English seitán con Yorkshire puddings


Una canción para disfrutarlo mejor: The Importance of Being Idle - Oasis (2005).

He aquí un clásico plato del domingo: jugoso seitán horneado y perfumado con romero, acompañado por golosos panecillos que parecen fritos, pero se cocinan al horno y una deliciosa salsa de manzana y cebolla dulce...irresistible, ¡hasta para los no vegetarianos!


Ingredientes para 2 personas:

Para la salsa:
1 manzana Golden
½ cebolla dulce
3 cucharadas de aceite OVE
1 cucharada de azúcar moreno
1 cucharada de vinagre balsámico
1 cucharada de harina 00
500ml de caldo vegetal
1 cucharada de salsa de soja
romero fresco y pimienta negra

Para el seitán:
250g de seitán
3 cucharadas de aceite OVE
1 pequeña taza de vino blanco
sal, pimienta negra, romero fresco

Para 6 Yorkshire Puddings:
1 huevo bio (*20g de sustituto de huevo)
50ml de leche (*vegetal)
50g de harina 00
sal y pimienta negra
aceite de girasol


Para empezar, ponemos el seitán cortado en lonchitas en un contenedor para el horno, lo cubrimos con la mezcla de aceite, vino, sal, pimienta negra y romero y lo dejamos descansar durante una hora.
Para preparar la salsa, juntamos en una sartén la manzana y la cebolla cortadas en trocitos, añadimos el aceite y el azúcar y caramelizamos unos 3 minutos a fuego vivo. Hecho esto, esfumamos con el vinagre y añadimos el caldo. Cuando el caldo empiece a espesarse, añadimos la cucharada de harina, mezclamos bien y dejamos cocinar unos 5 minutos más. Ponemos el preparado en el mixer, trituramos todo y lo volvemos a verter en la sartén filtrándolo con un colador a malla fina.
Para preparar los Yorkshire puddings, precalentamos el horno a 210º, cogemos 6 moldes para muffin, hechamos en cada unos de ellos media cucharadita de aceite de girasol y los ponemos en el horno. Mientras que el aceite se va calentando, en un bol batimos el huevo, la leche, la harina, el sal y la pimienta. Cuando el aceite esté caliente (unos 8 minutos), sacamos los moldes del horno, vertemos en cada uno un poco de masa y los volvemos a meter en el horno. Al mismo tiempo, empezamos a hornear también el seitán, A cabo de unos 12 minutos, tanto los puddings como el seitán deberían de estar listos y dorados. Volvemos a calentar la salsa, la ponemos en una salsera y la servimos al lado del seitán y de los puddings para que cada uno le heche la cantidad que más le apetezca. -Anna-







viernes, 22 de enero de 2016

Los pimientos de Padrón al horno con sal Maldon...¡qué pasión!



Una canción para dorarlos a la perfección: Jo de Petit - Malakaton (2011).

Originarios del convento de San Francisco de Herbón, en la galleguísima parroquia de Padrón, estos adorables pimentitos verdes fueron importados de América en el siglo XVI. Hoy en día, junto con las bravas, son uno de esos platos que al llegar a España uno piensa (perdonad el francesismo) "¿qué co*o es esto!?" pero que acaban generando una pura, nociva adicción y nos conviérten en pimientadictos dignos del zoo de Berlín. Y, nos preguntamos, ¿cuáles son los motivos a la base de esta peligrosísima dependencia? Bueno, hay muchos, como su tamaño de bomboncito, que permite comérselos de un bocado, o la deliciosa mezcla entre el sabor del aceite y los crujientes granitos de sal que los cubren, o la agradable inquietud de no saber si picarán o no ("Coma os pementos de Padrón: uns pican e outros non")...
Tradicionalmente los pimientos de Padrón se fríen, pero nosotros, que somos unos chicos muy sanos (je je je), os los proponemos al horno, espolvoreados por crujientes escamas de sal Maldon, una delicacy inglesa de elaboración artesanal.


Ingredientes para lograr la felicidad:
una cajita de pimientos de Padrón (250g)
2 cucharadas de aceite OVE
una pizca de sal Maldon y pimenta negra

La preparación no podría ser más sencilla. Precalentamos el horno a 200º. Ponemos los pimientos enteros, lavados y secados, en un bol, añadimos dos cucharadas de aceite y una espolvoreada de pimenta negra y mezclamos con las manos hasta estar seguros que el aceite los haya cubierto integralmente. Horneamos a 200º removiendo de vez en cuando hasta que estén bien dorados (unos 15 minutos). Servimos calientes con unas escamas de sal por encima. -Anna-



viernes, 15 de enero de 2016

Pan de plátano vegano con almendras y semillas de amapola


Una canción para que salga esponjoso y fragante: Pioggia d'Aprile - Carmen Consoli (2002).

Bueno, a la cuarta receta con plátanos, ya habréis entendido que estas delicias, dulces y extremadamente suaves, nos encantan. Pero, no os dejéis engañar, porque -igual que los cubitos veganos con nueces, los muffins banaNutella y los pancakes choco-nueces- este pan de plátano también tiene sus secretos y peculiaridades. Sí, porque no hay nada mejor que disfrutar, en un único mordisco, de una masa esponjosa, que desprende una delicada fragancia a vanilla, almendras y canela, interrumpida por la vivacidad de crujientes semillas de amapola. Ah, y no nos olvidemos de la irresistible corteza de semillas, avena, almendras molidas y azúcar que encierra este espectáculo de suavidad.


Ingredientes para un molde de Ø 20cm:
270g de harina de trigo integral
30g+10g de almendras molidas
1 cucharadita de canela
1 cucharadita de bicarbonato
15g+5g de semillas de amapola
1 pizca de sal
125g+2 cucharadas de azúcar moreno
90g de aceite de girasol de buena calidad
una cucharadita de extracto natural de vainilla
3 plátanos medianos maduros (o 2 grandes)
70g de leche de almendras (o qualquier otra leche vegetal)
2 cucharadas de avena integral

En un bol mezclamos la harina, los 30g de almendras molidas, la canela, el bicarbonato, las semillas de amapola y la pizca de sal. En otro bol, rompemos los plátanos con un tenedor hasta obtener una crema (no importa si quedan trocitos enteros), añadimos el azúcar, el aceite, el extracto de vainilla, la leche y mezclamos bien. Vertemos los ingredientes líquidos en los secos, mezclamos y ponemos nuestra masa en un molde untado con aceite o margarina. Con la mano, untamos ligeramente de aceite la superficie del bizcocho y la espolvoreamos con los últimos 5g de semillas de amapola, un puñado de avena integral, los últimos 10g de almendras molidas y dos cucharadas de azúcar moreno. Horneamos a 170º por 40 minutos, haciendo la prueba del palillo. - Anna -



lunes, 11 de enero de 2016

Moka mug cake


Una canción para que salga absolutamente perfecta: La Valse d'Amélie - Yann Tiersen (2001).

Imaginad la situación siguiente: un domingo por la tarde Anna y Marco tienen su cita semanal en Skype para ponerse al día con su alma gemela, Gaby. Faltan 20 minutos para la hora prevista y del estante de la cocina notan que un librito se asoma curioso. Se titula "Mug Cakes" (Blume, 2015). De pronto la exaltación se apodera de ellos. Entre una infinidad de tentadoras fotografías descubren una receta que emana voluptuosa intensidad incluso sin imágenes y entienden que con esa receta llenarán los 15 minutos que les separan de su cita. Reemplazan el café en polvo por un purísimo Espresso, añaden unos gramos más de chocolate et....voilá! Listos para dar envidia a Gaby!


Ingredientes para 1 mug cake:
1 cucharada de mantequilla
25g de chocolate negro (70% de cacao)
5 cucharadas de café espresso
1 cucharada de leche
1 huevo mediano bio
2 cucharadas de azúcar moreno
2 cucharadas de harina integral
½ cucharadita de levadura química en polvo
Para decorar:
2 cucharadas de nata montada
todo lo que os guste más


Tened en cuenta que todos los tiempos indicados en la receta dependen esencialmente de vuestro microondas. En el microondas derretimos la mantequilla con el chocolate troceado durante aprox. 40 segundos a la máxima potencia, mezclamos bien y, dentro de la misma taza, añadimos una cucharada de café, la leche y todos los demás ingredientes, mezclando bien con una cuchara. Cocemos en el microondas a la máxima potencia durante aprox. 1 minuto y 30 segundos, parando de vez en cuando la cocción si notamos que nuestra crema está a punto de salir de la taza. No os paséis del tiempo de cocción (aunque en unos puntos la masa os parezca un poco líquida), porque el único resultado que obtendréis será una mug cake seca. Una vez sacada del horno, agujereamos la mugcake con un palillo largo y vertimos el resto del café. Servimos nuestra maravilla a la taza tibia, con dos cucharadas de nata montada y unos granitos de café soluble, o una cucharada de crema de avellanas, o cualquier otra cosa que nos guste. - Anna -